21 noviembre 2007

nunca te dolera como me dolio ami.....


Se que te esta doliendo porque no fui una mas en tu lista, porque me dejste entrar en lo profundo de tu mirada, se que te duele el haberme perdido, se que tu dolor crece con el paso del tiempo, te duele porque sabes que yo tmb puedo ser indiferente, que mi orgullo es mas grande que el tuyo, te duele el no tenerme entre tus brazos, te duele el ver que entre lagrimas y dolor puedo sonrreir otra vez...

se que te esta doliendo ver como mi vida ha cambiado, tornandosee de mil colores y mil amores, te esta doliendo porque pude ser tuya eternamente, porque cometiste errores y no supiste cuidame y amrme, se que me vas a extrañar, que te ahogaras en tu propio llanto, moriran tus esapranzas y me amaras hasta el ultimo dia de tu vida, se que te duele y que meextrañaras, pero tu sufrimiento no se comparara nunca con lo que tu me has hecho... no te di motivos para que hirieras mi corazon, que te amo, se que fue triste el decirnos adios.

Porque te di mi corazon sin ponerte condicion, porque crei ke me kerias si finjias..???


creo ke siempre tendre en mi esa pregunta...
porke te di en un beso el corazon , pero se que te arrepentiras porque un amor como el mio nunca lo encontraras...

LAS HUELLAS


Una noche en sueños vi
que con Jesús caminaba
junto a la orilla del mar
bajo una luna plateada.

Soñé que veía en los cielos
mi vida representada
en una serie de escenas
que en silencio contemplaba.

Dos pares de firmes huellas
en la arena iban quedando
mientras con Jesús andaba
como amigos conversando.

Miraba atento esas huellas
reflejadas en el cielo,
pero algo extraño observé
y sentí gran desconsuelo.

Observé que algunas veces
al reparar en las huellas,
en vez de ver los dos pares
veía solo un par de ellas.

Y observaba también yo
que aquel solo par de huellas
se advertían mayormente
en mis noches sin estrellas,
en las horas de mi vida
llenas de angustia y tristeza,.
cuando el alma necesita
más consuelo y fortaleza.

Pregunté triste a Jesús:
Señor, ¿Tú no has prometido
que en mis horas de aflicción
siempre andarías conmigo?
Pero noto con tristeza
que en medio de mis querellas
cuando más siento el sufrir
veo solo un par de huellas.

¿Dónde están las otras dos
que indican tu compañía,
cundo la tormenta azota
sin piedad la vida mía?

Y Jesús me contestó
con ternura y comprensión:
Escucha bien hijo mío,
comprendo tu confusión
siempre te amé y te amaré
y en tus horas de dolor
siempre a tu lado estaré.
para mostrarte mi amor.

Más si ves solo dos huellas
en la arena al caminar
y no ves las otras dos
que se debieran notar,
es que en tu hora afligida,
cuando flaquean tus pasos,
no hay huellas de tus pisadas...
porque te llevo en mis brazos.